
Delicado, puro, sensible. Así podríamos definir el sonido de Marta Cascales Alimbau, pianista y compositora de Barcelona que presenta su segundo álbum Anoche, bajo la discográfica neoyorquina Sonder House. Después de su primer disco Light-House (Piano and Coffee Records, 2018) y una lista de sencillos entre los que destacan Almost here (con más de un millón de reproducciones en Spotify), sale a la luz su nuevo trabajo.
Anoche (2020) llega después de una residencia artística en Tokio. No es la primera vez que nuestra protagonista disfruta de este tipo de experiencias, que dicen haberle aportado mucho tanto profesional como personalmente. Anteriormente, había sido seleccionada como artista residente en San Francisco y Florencia. «Viajar y conocer diferentes lugares del mundo me enriquece mucho, me da perspectiva. Además, estar durante un tiempo alejada de lo cotidiano y familiar me despierta muchas sensaciones nuevas; y todas esas experiencias se filtran en mi música de alguna manera. Profesionalmente, me parece muy importante estar conectada con otros lugares y tener una visión internacional, siempre te abre muchas puertas».
Este nuevo disco se presenta como la culminación de lo que musicalmente ha desarrollado la pianista estos dos últimos años, después de la presentación de su álbum debut en 2018. «Durante estos dos años me he tomado el tiempo para experimentar nuevas maneras de expresarme con el piano, buscando cada vez más mi sonido particular, y entre otras muchas cosas, he aprendido que tienes que seguir tu intuición y que también tienes que ser valiente para encontrar tu propio sonido», nos cuenta.
Cada pieza tiene una historia detrás, la mayoría de ellas están escritas de noche, al atardecer o al amanecer, con un destello de inspiración. Así promocionaba Cascales la llegada de Anoche (2020) en Instagram. «Me di cuenta de que todas las piezas del álbum habían surgido de una manera muy espontánea, en un destello de inspiración, y especialmente en esos momentos del día, donde se respira calma y recogimiento», nos cuenta. Inspirada por las experiencias más emocionales que ha vivido, divide su proceso de composición en dos fases: «la primera es ese momento en el que te sale una melodía o idea musical, sin pensarlo, que a mí me gusta llamarlo el material en bruto, y después viene la fase más técnica, donde desarrollo y doy forma, aplicando mis conocimientos de una manera más consciente o racional».
Si nos fijamos en Anoche (2020), el álbum realiza un «viaje introspectivo» a través de sus siete canciones. Abriendo con el popular y melancólico Lágrimas negras, el disco concluye con Anoche, un tema mucho más fresco y alegre. «Lágrimas Negras de alguna manera es la pieza que desencadenó todo el disco, por eso para mí tenía sentido abrir con esa pieza, además que me gusta mucho ese inicio, con algo familiar, pero diferente a la vez. Y Anoche inevitablemente me sonaba como a final, decidiendo el orden de las piezas vi muy claro que tenía que ser la pieza que cierra el álbum».
Algunos de los temas se inspiran en situaciones más personales para Cascales, como son el caso de Vuelvo, Noche y Vuelo. Sin embargo, encontramos en el disco canciones inspiradas en otras obras artísticas. Lágrimas negras, reinterpretación del bolero clásico; Contigo, inspirada en el mítico tema Me quedo contigo de Los Chunguitos; o Albura, inspirada en un cuento de Julio Cortázar.
«Lágrimas Negras la conocía de siempre, pero fue gracias al disco Lágrimas Negras de Bebo Valdés y Diego el Cigala que me despertó la curiosidad de llevarla al piano solo. La pieza Contigo la compuse después de ver la actuación de Rosalía en los Goya 2019 cantando Me quedo contigo. Me llegó mucho esa actuación, y esa misma noche escribí Contigo, cogiendo la letra de Me quedo contigo e inventándome nuevas melodías. Fue como un experimento, pero me encantó la sensación esa de que el piano parece que medio habla o canta. Y Albura está inspirada en el cuento Los limpiadores de estrellas de Cortázar, que cuenta que había una sociedad que tuvo la idea de limpiar todas las estrellas del universo porque decía que habían perdido el brillo con el paso del tiempo. Querían conseguir el cielo perfecto (con todas las estrellas “limpias”) pero después de limpiar todas las estrellas, había tanta luz en el universo que la noche desparece para siempre. Cortázar lo explica maravillosamente bien, os invito a que leáis el cuento y después escuchéis la pieza y espero que intuías la relación entre la música y el cuento».
Si algo podemos destacar del trabajo de Cascales, más allá de lo meramente musical, es la parte visual. Es notable la preocupación estética que ostenta todo lo que hace: portadas de los sencillos, publicaciones en redes sociales, página web. «Le doy importancia a la parte visual porque de alguna manera pienso que mi música es muy visual, o al menos yo así la siento. Y me parece súper interesante como el sonido se puede complementar con la imagen. La música siempre es el núcleo de todo, pero me gusta pensar en el universo visual que la acompaña, en el conjunto».
Su hermana Carla, con la que trabaja desde hace años, aporta esa parte más plástica. «La implicación por su parte sale de una manera muy natural. Hace años que trabajamos juntas, somos un equipo ya desde pequeñas, y me parece que la complicidad y vínculo de hermanas se nota en todo lo que hacemos; es muy bonito». En el caso de Anoche, Carla ha creado una escultura de vidrio especialmente para el álbum, que se puede ver no solo en la portada del disco sino también en el videoclip de Vuelo. Marta nos confiesa que, con la escultura, se capturan las sensaciones de la música en volumen físico.
El videoclip donde aparece la escultura:
Siendo consciente de la situación actual, le preguntamos por la presentación en directo del disco. «Por ahora no puedo anunciar fechas. En principio iba a ser a finales de mayo, pero de momento se pospone para después del verano, iré actualizando por las redes. La verdad que tengo muchas ganas de presentarlo en directo, todo llegará».